Capítulo 14: Puré de Monstruo
Traducido por: Tania
Corregido por: Jess
Dervish comenzó a interrogarme para averiguar por qué estaba aquí, y cómo conocía a Beranabus. Pero Shark lo cortó:
—El ataque podría comenzar en cualquier minuto. Necesitamos prepararnos.
Abrió
las puertas y me hizo un gesto para que entrara. Estaba increíblemente
oscuro y ruidoso. La habitación era gigantesca, pero estaba abarrotada
de punks. La mayoría de ellos eran hombres de la edad de Dervish o un
poco mayores. Una banda estaba tocando en un pequeño escenario a nuestra
derecha. Golpeando levementemente sus guitarras y baterías como si el
mundo estuviera a punto de terminarse y estuvieran determinados a
concluir la canción antes de que sucediera. El cantante gritaba en el
micrófono, principalmente groserías, alzando los dedos del medio y
lanzando bramidos al público.
Los
punks lo adoraban. Estaban bailando como locos, saltando de arriba a
abajo, o sosteniéndose entre ellos mismos y dando vueltas salvajemente.
Algunos estaban peleando, pero parecía que era algo natural. Estaban
sangrando, más no les importaba —eso solamente le agregaba colorido—.
Habían
más piercings y tatuajes de lo que alguna vez hubiera visto. Eso me
recordó los nudillos de Shark, así que dirigí mi vista a sus manos. Su
nombre estaba tatuado en ellas, una letra por dedo, con una cabeza de
tiburón en blanco y negro llenando el espacio entre el pulgar y el dedo
índice, la mandíbula ampliamente abierta y los dientes reluciendo.
—Suena como un taladro de dentista —le grita Shark a Dervish, frunciendo el ceño ante el ruido. — ¿Realmente te gusta esta porquería?
—Es la nueva ola —sonríe Dervish. —La música del cambio. ¡An-ar-quiiiiaaa! — responde agitando el puño en el aire.
—Madura —resopla Shark, y luego me dirige la mirada. — ¿Te gusta esto?
—Nunca había escuchado algo como esto —le digo. —Me está comenzando a doler la cabeza. Shark se rie.
—El niño tiene más sentido que tú, Grady.
La
canción termina y la banda se toma un pequeño descanso para que uno de
los guitarristas pueda reemplazar la guitarra que acababa de romper.
Dervish usa la pausa para ponerme al tanto de la situación.
—Alguien
está invocando a un demonio. Hemos estado tratando de detenerlo desde
hace unas semanas. No sabemos quién es el que lo está haciendo, pero
sabemos que el cruce va a ocurrir aquí, esta noche. Si no conseguimos
detenerlo, planeamos asesinar al demonio u obligarlo a regresar.
—No podemos matarlo—dice Shark. —No somos lo bastante fuertes como para destruir a un demonio. En el Universo Demonata, tal vez —pero devolverlo de donde viene es lo mejor que podemos esperar.
— ¿Han hecho esto antes? —pregunto.
—Yo sí. Esta es la primera probada de acción para Grady—le da un golpecito en el brazo a Dervish. —No estoy seguro de que esté listo para esto.
—No te preocupes por mí—gruñe Dervish. —Haré lo que tenga que hacer.
—Sé que lo harás—dice Shark con una risita. —Ahora, intentemos encontrar a la “bolsa de basura amante de los demonios”, aunque apuesto no lo sabremos antes de que...
—Allí está—interrumpo,
señalando a un hombre de mediana edad cerca del escenario. Está
vestido como punk, pero en realidad no parece uno. Lean y musculoso, con
un espeso corte de cabello mohicano. Sus labios se estaban moviendo
constantemente. Es el foco de los parches de luz, los que palpitan a su
alrededor en una ventana casi completamente formada.
— ¿Cómo lo sabes? —pregunta Shark suspicazmente.
—Eso no importa. Es él. Está a punto de terminar. Otros pocos minutos y la ventana estará abierta.
Shark
lanza una maldición, y luego comienza a caminar hacia el hombre con el
mohicano. Dervish se lanza tras Shark, y yo a continuación de Dervish.
Mientras avanzamos a codazos entre la multitud, la banda aúlla una nueva
canción, más rápida, y el lugar se vuelve más y más salvaje. De
repente, los punks están saltando alrededor mío, golpeándose unos a
otros, cayéndose, lanzando patadas y golpeando a cualquiera que esté a
la vista. Me noquean y caigo al suelo. Alguien pisa mi mano derecha y
lanzo aullidos de dolor. Intento ponerme de pie, pero me tiran al suelo
de nuevo. Peleo, jadeando, temiendo ser aplastado por un mar de punks
hasta morir. Entonces Shark llega a mi lado, con los puños en alto,
golpeando a los punk para que se alejen. Dervish me levanta y me pone
sobre sus hombros. Es más fuerte de lo que parece.
—Sujétate fuerte—dice, y nos abalanzamos hacia delante de nuevo, Shark a la cabeza.
Golpeo
a unos cuantos punks, aprovechándome de mi posición, tratando de
aplastar unas cuantas narices en venganza. Entonces recuerdo que tengo
una misión más importante y vuelvo mi atención hacia el escenario. Tengo
una mejor visión del invocador de demonios desde aquí. Puedo ver como
comienza a temblar y como brota espuma de su boca. Las luces palpitan en
la ventana, todas al mismo tiempo.
— ¡Demasiado tarde! —grito. —Va a abrirse.
— ¡No! —ruge Shark, quitando a un punk especialmente grande de su camino.
— ¡Podemos lograrlo! No voy a...—
Una
explosión. Parte del escenario estalla, hiriendo con astillas y clavos a
la gente que se encuentra más cerca de él. Gritos de agonía. Uno de los
guitarristas cae de rodillas, mirando el sangriento desastre. El
cantante no se detiene, está tan concentrado en su canción que no
escucha nada más que su propia voz. Hay una ventana de luz púrpura al
lado del hombre del mohicano. Él está de pie junto a ella
orgullosamente, sin ninguna herida. Sonríe ante el caos. Pone un par de
dedos entre sus labios y da un silbido. Un demonio salta por la ventana.
El cuerpo de una gallina. Tres cabezas de cerdo. Luce ridículo, casi
para reírse, hasta que abre la boca y escupe a un punk cercano. El
escupitajo le da en pleno rostro, provocándole burbujas y quemándolo. El
hombre cae, tratando de gritar, pero sin poder hacerlo.
Dervish pedía anarquía unos cuantos minutos atrás —ahora la tiene—.
La habitación lucía salvaje con el baile, los saltos y la pelea antes
de esto, pero cuando los punks vieron al demonio en acción se volvieron
completamente locos. El pánico se apoderó de la multitud. Chillando, se
abalanzaron hacia las puertas de escape. El hombre con el mohicano se
reía mientras daba un paso hacia el demonio.
— ¡Ahora veremos quien tiene el poder! —gritó por sobre los caóticos alaridos. —Todos
estos años de tener que inclinarse y lamer las botas de alguien más.
¡No más! Ahora aprenderán a temerme. Este es mi mundo ahora. Todos
ustedes—.
No
alcanza a llegar más lejos. El demonio, sin mostrar ningún sentido de
gratitud, lo escupe. El hombre se deja caer hacia atrás, el ácido ya
carcomiendo su rostro, disolviendo su carne y cartílago, comiendo a
través de ellos para chisporrotear su cerebro. ¿Quién dijo que no había
justicia en el mundo?
Fuimos
empujados atrás por la enloquecida multitud. Shark grita con furia y
sorpresa. Trata de pelear contra ellos, pero no es lo suficientemente
fuerte como para enfrentar la marea de punks en pánico. Caigo al suelo
de nuevo y siento la habitación cerrarse sobre mí. Está vez estoy seguro
de que seré aplastado. Pero Dervish mantiene la calma. Hay magia en el
aire —puedo sentirla filtrándose por la ventana—.
Se aproxima a ella, ladra unas cuantas palabras y repentinamente el
espacio alrededor de nosotros está limpio, los punks apartados por una
fuerza invisible. Nosotros tres estamos solos, protegidos por una
burbuja de energía mágica, como la que Nadia y los otros crearon en la
cima de la aguja de roca.
— ¡Shark! —grita
Dervish, apuntando con la cabeza al demonio, el cual había escupido a
un tercer punk y estaba ahora agachado sobre los restos del hombre con
el mohicano. Está sorbiendo el escupitajo, junto con la pegajosa masa
que es todo el lado izquierdo del cráneo y los sesos del hombre.
— ¡A él! —gruñe
Shark, avanzando hacia adelante. Se aprovecha de la magia, nervioso,
luego salta a través del aire, aterrizando a un lado del demonio. Antes
de que este pueda reaccionar, agarra una de sus cabezas y la retuerce
salvajemente hacia la izquierda, luego a la derecha, rompiéndola y
arrancándola de su base.
El
demonio chilla y escupe a Shark con las dos bocas restantes. Shark se
quita del camino de uno de los escupitajos y desvía el otro con una ola
proveniente de su mano cargada de magia. Lanza la cabeza cercenada —aún moviéndose— a
través de la ventana, y luego agarra otra. Esta vez el demonio elude
los dedos tatuados y alza el vuelo, haciendo un ruido entre similar a
los chillidos de un cerdo, o al cacareó de una gallina.
El
demonio se dirige a una de las ventanas del frente del edificio, antes
de que alcance a llegar y la atraviese para asesinar a los punks que se
han escapado hasta la calle pasando ante el desconcertado portero,
Dervish murmura un rápido conjuro. El vidrio se vuelve acero. El demonio
no lo ve. Salta cacareando, solo para estrellarse fuertemente contra el
metal y caer al suelo.
Dervish usa magia para despejar un camino entre nosotros y el demonio.
Se lanza hacia adelante mientras el demonio sacude su cabeza confundido y
se interpone entre el monstruo y la puerta del frente.
— ¿Estás seguro de que no podemos matarlo? —le grita a Shark.
— ¡Sí! —brama Shark.
—Entonces obliguémoslo a regresar por la ventana —me mira disimuladamente. —Kernel, ¿puedes moverte para bloquear su camino hacia las puertas traseras?
—No estoy seguro—murmuro. —No soy bueno peleando…
—No tendrás que pelear—me asegura Dervish. —Solo haz como que sabes lo que estás haciendo, como si fueras la pieza más cruel de suciedad de la habitación. Frunce el ceño. Gruñe. Aúlla. Si va a por ti, yo entraré en acción.
— ¿Estás seguro de que no podemos matarlo? —le grita a Shark.
— ¡Sí! —brama Shark.
—Entonces obliguémoslo a regresar por la ventana —me mira disimuladamente. —Kernel, ¿puedes moverte para bloquear su camino hacia las puertas traseras?
—No estoy seguro—murmuro. —No soy bueno peleando…
—No tendrás que pelear—me asegura Dervish. —Solo haz como que sabes lo que estás haciendo, como si fueras la pieza más cruel de suciedad de la habitación. Frunce el ceño. Gruñe. Aúlla. Si va a por ti, yo entraré en acción.
Le
creo a Dervish, aún cuando apenas lo conozco. Es menor que Shark, pero
habla como si fuera mayor. Así que con una mínima vacilación hago lo que
me pide y me dirijo lentamente a la izquierda, a lo largo del camino
que Dervish está creando. Tomo una posición a medio camino entre él y
Shark, abro mis brazos, miro fijamente al demonio y actuó como si fuera
mucho más poderoso y tuviera mucha más confianza de la que tengo. El
demonio se encuentra de pie. Sangre sale de su cuello, donde su tercera
cabeza había sido arrancada. Saliva gotea de las bocas que le quedan,
chisporroteando donde toca el suelo, quemando el viejo piso de madera.
Lanza una bola de saliva zumbando hacia Dervish, pero este agita una
mano en el aire y la bola explota. Entona un conjuro y varios ladrillos
se desprenden del muro y vuelan hacia el demonio, estrellándose en su
cuerpo y cabezas. El demonio batea los ladrillos lejos, su mirada pasa
desde Dervish hasta Shark y luego hasta mí. Está buscando un punto
débil. Me mira persistentemente, debido a que soy el más pequeño.
Quiero correr por protección como los punks, pero no me dejo vencer por
el temor. En vez de eso, doy un paso adelante, haciendo muecas de burla
al demonio, invitándolo a que me ataque. La táctica funciona. Con un
grito petulante, el demonio se dirige a la ventana de luz púrpura, más
allá del cantante, quien sigue rugiendo en su micrófono, los ojos
cerrados, sin idea de lo que está ocurriendo. Shark maldice al darse
cuenta de que ha dejado la ruta hacia la ventana abierta por accidente. Arremete
contra el demonio. La bestia se lanza velozmente hasta la ventana y
salta a la seguridad, riendo histéricamente hacia Shark, pensando que
había podido más que él.
— ¡Qué gran grupo! —grita, poniéndose de pie a la izquierda de la ventana, en guardia por si el demonio regresa. — ¿Vieron a ese bebe correr? ¡Realmente pateamos su trasero!
—Qué entusiasmo —murmura
Dervish, acercándose a la ventana, tomándose una pausa para fundir los
muros alrededor de las puertas delanteras y traseras, permitiendo el
paso a más punks —más fácil que tratar de restaurar el orden. —Nunca
me había sentido tan poderoso. Nunca pensé que pudiera hacer tanto. La
magia en el aire… la forma en que pude utilizarla… ¡increíble!
—Tienes el gusto de la acción ahora—dijo Shark con una risita. —Estabas
nervioso antes. Eso es comprensible. Todos entramos en pánico la
primera vez. Pero has atrapado a la sabandija. Pelear con los demonios
es tu especialidad, ¿no?
—Tal vez—dice Dervish, con una sonrisa torcida, mirando sus manos con una mezcla de orgullo y asombro. —Hice la mayoría de eso sin pensarlo. Es como si hubiera habido alguien en mi interior, moviéndome como un títere.
—Las ventanas de acero fueron una buena idea—lo elogia Shark. —Eres más creativo que yo. Yo hubiera tratado de arrastrar el demonio de vuelta.
— ¿Por cuánto tiempo permanecerá abierta la ventana al otro universo? —pregunta Dervish.
—Tal vez unos cuantos minutos más—responde Shark. —Nos
quedaremos cuidándola hasta que se cierre, para estar seguros, y luego
nos largaremos de aquí. Trata de explicarle a un policía que formas
parte de una gran guerra contra los demonios, — ¡veamos a donde te lleva!
Dervish
examina la ventana con inocente curiosidad. Mete sus dedos dentro de la
luz, aúlla cuando desaparecen, saca la mano y mueve los dedos,
aliviándose al ver que aún siguen en su lugar. Shark se ríe.
—También hice eso la primera vez.
— ¿Has entrado?—pregunta Dervish.
—Una vez. Volví enseguida —no quería quedarme atrapado ahí.
— ¿Qué viste?
—Un mundo como el nuestro, solo...
—Debo irme —lo interrumpo. Se habían olvidado de mí. Ahora me miraban. —Beranabus, debo regresar con él. ¿Recuerdan?
— ¿Quieres atravesar la ventana? —dice Shark frunciendo el ceño.
—No. Pero tengo que hacerlo. Puedo encontrarlo cuando estoy en el universo Demonata.
— ¿Y qué pasa si el monstruo te está esperando en el otro lado? —dice Dervish. Me encojo de hombros tristemente.
—No tengo alternativa. No puedo encontrar a Beranabus aquí.
— ¿No vendrá a buscarte? —pregunta Shark.
—Tal vez. Pero no estoy seguro de que pueda encontrarme tan fácilmente como yo lo puedo encontrar a él. Tengo que ir —dije, urgentemente esta vez, consciente de que la ventana podía cerrarse mientras estábamos discutiendo. —Un demonio secuestró a mi hermano. Tengo que rescatarlo.
Doy un paso hacia la ventana. Shark extiende su gran mano tatuada y me detiene.
—No hay forma de que deje a un niño atravesar eso solo—gruñe. Frunzo el ceño y sonríe. —Mejor iré contigo, y me aseguraré de que no te hagas ningún daño. ¿Dervish? —dice mientras alza una ceja en señal de pregunta.
Dervish estudia la ventana nuevamente. Se pasa la lengua por los labios nerviosamente. Luego asiente.
—Sí. Qué demonios. De todas formas nunca hay mucho que hacer aquí un sábado por la noche.
Mis ojos se llenan con lágrimas de felicidad.
—Gracias—murmuro.
—No tienes que agradecer—dijo Shark. —Sólo estate listo para pelear.
Dicho
eso, agarra el cuello de mi camiseta y me empuja a través de la ventana
de luz púrpura, de vuelta a la caldera de los Demonata.
Oigan,¿No va un capitulo antes que este? Porque no explica como conoció a Shark, o a Dervish. O como termino ahí ._.
ResponderEliminarEl Capítulo 13 ya ha sido publicado. Saludos.
Eliminarsigan asi...los felicito...
ResponderEliminarsolo una duda??, tambien van a traducir los de la saga de mister creslyp, y los demas libros?
El primer libro de la saga de Larten Crepsley ya está traducido al Español. Nosotros por el momento estamos traduciendo la Saga Demonata, pero eso no significa que no traduzcamos (algún día) las demás novelas de Darren Shan ;)
EliminarUna amiga mia y yo estamos traduciendo el resto de los libros de La saga de Larten Crepsley(:
Eliminarque bien...espero leer los demás libros de mr crepsley...muchas gracias por la información.
EliminarChicos y Chicas!!!! Les Quiero agradecer por tomarse este arduo trabajo entre manos!!!! Amo los libros de Darren Shan y creanme estan haciendo algo maravilloso. Sigan asi y mis reconocimientos para cada uno de ustedes.
ResponderEliminarMuchas muchas gracias!!!! De verdad! Gracias por darnos la opoortunidad de leer tan asombrosos libros!!!
ResponderEliminarSigan asi!!!!
Saludos!!!
me gustarìa, colaborarles con la traducciòn. Si gustan pueden enviarme los capitulos que necesiten ir adelantando a mi email "stiven.salazar74@gmail.com". Y me dejan nota a quien debo enviarlos luego de traducirlo para la revisiòn.
ResponderEliminarQuedo atento. Muchas gracias por los capitulos traducidos...
Hola Stiven (:
EliminarDisculpa que contestemos tan tarde, pero la verdad todo aquí ha sido una locura :| Dejame ordeno todo por aquí y sí aún te interesa cooperar responde por favor este mensaje y yo te aviso! Saludos!
son unos grosos sigan asi muchas gracias
ResponderEliminarSUBAN EL 15 POR FAAAAAAAAAAAAAAAAA!!
ResponderEliminarGRACIAS POR TOMARSE LA MOLESTIA DE TRADUCIR ESTOS CAPITULOS OJALA PUEDAN CONTINUAR
ResponderEliminarYa no puedo esperar, pueden mandarme capitulos para traducir y/o corregir, yo corregi el capitulo 9 (pueden checarlo).
ResponderEliminarMandenme a varo_flow42@hotmail.com, en fb contactenme en http://www.facebook.com/zetadeacheerre
Hola Alvaro, como le dije a Stiven haya arriba las cosas han estado un poco locas, pero déjame ordeno todo por aquí y sí aún deseas ayudar responde este mensaje por favor y después yo me contacto contigo! (:
EliminarSaludos!
hola! gracias por traducir los capitulos. Por favor suban el 15 gracias a todos!! Saludos (:
ResponderEliminarholaa como van!
ResponderEliminarya tengo el cap 15 traducido y corregido
me pueden contactar en gusan700@hotmail.com
y se los envio si quieren
Mil gracias por las traducciones :D me he enamorado de los libros de Mr. Shan :D :3 sigan por favor :) le estan haciendo un favor al mundo al traducir estas obras tan increibles :D <3
ResponderEliminarholaaa!
ResponderEliminarya tengo hasta el 18 traducido y corregido
me pueden contactar a gusan700@hotmail.com
y se los envio para q los suban al blog q esta muy buenoo!
vemos
Muchas gracias, ya te mandé un mail ;)
EliminarMuchas gracias por traernos los caps del libro, hacia ya tiempo q se me habia olvidado q los tenia en la compu muertos de la risa 0//0 en un momento me pongo al dia XD
ResponderEliminar